domingo, agosto 24, 2008

El incombustible Don Ricardo


Hay recuerdos que se resisten a partir.
Cuando tenia como 7 años y las calles solo eran piedrecillas que adornaban la calzada, compraba el pan siempre a las 9, todos los días a excepción de sábados y domingos que eran mis días de descanso. La primera aventura del día, luego de lavar muy bien mis dientes, era ir a comprar el Pan. Caminaba por esas calles viejas incrustadas con piedras cada mañana con la única misión de entregar aquella ambrosia mañanera.
Lejos, en la esquina, de cuando en cuando, con el paso de algún automóvil empolvado me veía. A veces creía que era uno de los pocos habitantes de la ciudad que despertaba tan temprano, obviando el despertar de mi madre cada madrigada; sin embargo, todos los días, exceptuando los sábados y domingos insisto, Don Ricardo me recordaba cuan equivocado estaba. Cada mañana me saludaba cariñosamente con una escoba de paja en las manos barriendo nada y con una sonrisa gigante dibujada en su cara. En aquellos días respondía con un caluroso “buenos días Don Ricardo”, que adornaba con una sonrisa más grande que la del receptor del saludo. Don Ricardo, hombre sin oficio conocido, dedicaba su tiempo a arreglar Bicicletas, las maquinas de dos ruedas arruinadas buscaban sus manos, más de alguna vez las hechó en la mía, no era un excelente mecánico pero cobraba barato. A este oficio subterfugio, sumaba la administración de un boliche insignificante donde decenas de hombres pasaban horas ahogando sus alegrías, penas y sueños en alcohol. Creo que en los años que cumplí aquella misión insignificante, Don Ricardo fue el mayor asesino de la ciudad, con diez hígados destruidos marcaba tendencia en el hampa, sin armas ni violencia, solo con un vaso y una botella.
El hedor nauseabundo del alcohol y el vomito, construían un collage repugnante, mas aquel neófito mecánico siempre, con aquella escoba de paja barriendo nada, salía a saludarme.
Hoy con trescientos sesenta y nueve hígados a su haber, goza su libertad barriendo nada, con la misma escoba con la que me saludaba.....hace ya mucho tiempo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

me agrada como escribes...jamás he podido comprender si es cómico, triste o ambos...
lo importante es que me gusta...como ayer que vi un documental y había una escena donde leían un mensaje telegrafiado, me dio un ataque de risa fulminante y la joha me miraba, al final también se terminó riendo.
me encantaría que estuvieras acá, ha sido mucho tiempo sin ti, me haces falta, te amo mashi.

sol.

Anónimo dijo...

Esta tarde te vi, nerviosa de esperar
Por eso me vestí, apenas sin hablar
Hoy hace un año ya, que alegre y sin dudar
De blanco te lleve, ante el juez del lugar.

He mirado el reloj, las ocho van ser
Tu traje no llego, lo esperas desde ayer
Y el moño que lucir, pretendes hoy mujer
Con tanto ir y venir, termino por caer.

Corres vienes y vas, por medio del salón
Te enciendes más y mas, lo mismo que un ciclón
Y no sabes que hacer, si reír o llorar
Yo cumplo mi deber, yo debo de callar.

No querrás pretender, que aguarde la función
Y no podremos ver, ni un acto de malón
Tomando sin tardar, en vuelo un avión
Podríamos llegar, al bajar el telón.

Buen Aniversario, buen Aniversario.

El vestido llegó, ya puedes respirar
También respiro yo, a punto de estallar
Mas pronto comenzó, un drama singular
Tu traje no cerró, y te oi sollozar.

A tu espalda corrí, con ganas de ayudar
Tan pálida te vi, como una flor de azar
Y el cierre descorrí, mas luego al intentar
Cerrarlo lo partí, ay de mi por piedad
A las once por fin, cocido el desgarrón
Pareces un jazmín envuelta en el bizón
Tratamos de alcanzar un acto de malón
Tan justo que al llegar, termina la función.

Donde quieres cenar, muy triste te pedí
Tardaste en constestar, diciendo luego así
Prefiero caminar, contigo por París
Y luego regresar para ser muy feliz.

Buen Aniversario, buen Aniversario…...

Anónimo dijo...

mmm....recordar el pasado, cuantas historias más se podrían recordar, cuantos Don Ricardo en la vida de todos, eso si, una escoba jamás barre nada, siempre hay ilusiones, sueños, penas, desdichas...y obvio...polvo, aunque sólo eso sea, ya es algo que barrer...