martes, septiembre 23, 2008

Grandes Chilenos.

*TELEVISIÓN-CHILE: Allende la historia
Por Daniela Estrada *

*SANTIAGO, 18 sep (IPS) - El fallecido presidente socialista Salvador Allende, derrocado violentamente por fuerzas militares el 11 de septiembre de 1973, fue elegido como el chileno más grande de la historia en una votación popular organizada por un controvertido programa de televisión.*

El espacio "Grandes Chilenos de Nuestra Historia", de la estatal Televisión Nacional de Chile, finalizó en la víspera con Allende superando por estrecho margen de votos al marino y abogado, Arturo Prat, héroe de la llamada Guerra del Pacífico, librada contra Bolivia y Perú entre 1789 y 1883.

Mientras Allende logró 38,81 por ciento de los más de cuatro millones de votos emitidos por los televidentes, Prat obtuvo 38,44 por ciento de apoyo.
En tercer lugar, con 7,97 por ciento, quedó el sacerdote jesuita Alberto Hurtado (1901-1952), declarado santo en 2005 por el papa Benedicto XVI.

Le siguieron el cantautor Víctor Jara, torturado y asesinado poco después del golpe en 1973 por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), el político y guerrillero Manuel Rodríguez (1785-1818), actor clave del proceso de emancipación de España a comienzos del siglo XIX, y el militar José Miguel Carrera (1785- 1821), otro prócer de la independencia.

Más abajo quedaron el líder indígena mapuche, Lautaro (1534-1557), y los poetas Gabriela Mistral (1889-1957) y Pablo Neruda (1904-1973), ambos galardonados con el premio Nobel de Literatura. En décimo lugar quedó la notable cantautora Violeta Parra (1917-1967).

Allende fue primero dirigente estudiantil, luego diputado, senador, ministro y finalmente el primer presidente socialista elegido democráticamente en el mundo. Entre sus más destacadas obras figura la nacionalización del cobre, el principal producto de exportación de Chile.

Se suicidó en el Palacio de La Moneda el 11 de septiembre de 1973, cuando la sede del gobierno era atacada por tierra y aire por las fuerzas militares que encabezaba el general Pinochet, fallecido en 2006, quien instauró una cruenta dictadura de 17 años.

El triunfo de Allende "significa que la sistemática labor de desprestigio y denigración de su figura realizada por la dictadura y las fuerzas sociales y políticas que le dieron sustento, así como el ocultamiento vergonzante de su obra que han realizado las fuerzas en el gobierno desde 1990, no han dado resultado", señaló a IPS el historiador chileno Sergio Grez.

"La actualidad, vigencia y popularidad de Allende en el Chile actual debe explicarse no sólo por su muerte heroica sino también porque numerosos chilenos siguen alentando sueños y proyectos de profundo cambio social, que rescatan muchos de los elementos del allendismo de las décadas del 50, 60 y 70", indicó el académico de la Universidad de Chile.

"A diferencia de otros personajes de la historia nacional y mundial, la figura de Allende no se ha empequeñecido luego de terminarse su ciclo vital.
Al contrario, se ha mantenido y crecido, a pesar de la 'caída de los muros' y del 'fin de la historia' anunciado por algunos exegetas de la sociedad actual", comentó. Quien lo secundó en la votación fue Arturo Prat (1848-1879), el joven capitán que comandó la corveta Esmeralda en el llamado
Combate Naval de Iquique, el 21 de mayo de 1879, buque que fue hundido por el monitor peruano Huáscar. Es considerado un héroe porque prefirió morir al abordar el Huáscar, antes que rendirse ante la superioridad peruana.

Pese a perder esa batalla, Chile ganó finalmente la Guerra del Pacífico (1879-1883), también conocida como del Salitre, que le significó anexarse importante territorio peruano y boliviano y dejar a ese último país sin salida soberana al océano Pacífico.

"Prat es también una figura heroica, pero a diferencia de Allende, que fue un héroe de la lucha por la emancipación social, Prat es un héroe patriótico en la fase final de la expansión del Estado nacional", explicó Grez.

"Sin haber sido conservador, sino más bien liberal, Prat ha sido enarbolado en esta votación como el símbolo de los sectores conservadores de la sociedad actual para evitar un nuevo triunfo, esta vez simbólico de Allende", añadió.

"Por Internet han circulado profusamente mensajes de sectores de derecha y de militares en retiro, se dice que también en servicio activo, llamando a votar por Prat para impedir el triunfo del 'comunista' Allende", relató el historiador. Inclusive, en julio se informó que un hacker intervino la página de Internet del programa para que ganara el héroe de la Guerra del
Pacífico.

"Esos sectores conservadores, a diferencia de algunos militantes y académicos de izquierda que han mirado con olímpico desdén el concurso televisivo, entendieron bien el contenido político de este enfrentamiento y han movilizado todas sus fuerzas para ganar esta batalla simbólica", indicó
Grez.

El programa "Grandes Chilenos de Nuestra Historia" fue una adaptación de una licencia de la cadena multimedia británica BBC (British Broadcasting Corporation).

Hasta ahora, la versión original, "Great Britons" (Grandes británicos), donde triunfó el primer ministro Winston Churchill (1874-1965), ha tenido 18 réplicas en todo el mundo.

En Estados Unidos, fue elegido el ex presidente de ese país Ronald Reagan (1911-2004), en Alemania el canciller (jefe de gobierno) Konrad Adenauer (1876-1967), en Francia el estadista Charles De Gaulle (1890-1970) y en India, la madre Teresa de Calcuta (1910-1997).

En Chile, el objetivo fue elegir al hombre o la mujer que más contribuyó a la construcción de un país que celebrará en 2010 el bicentenario de su independencia de España.

Primero, se convocó una comisión asesora, de 18 intelectuales, quienes eligieron a 60 figuras de todos los tiempos, ya fallecidas. También se incluyó a extranjeros cuyo aporte al país fue sobresaliente.

Luego, se dejó en manos de estudiantes y profesores de enseñanza básica, media y superior de todo Chile la selección de los 10 finalistas. Las votaciones para el público general --a través de la telefonía fija y celular y por Internet-- se abrieron el 8 de julio cuando comenzó la transmisión semanal de documentales con la vida y obra de los personajes en competencia.

Durante todo el proceso, el programa recibió innumerables críticas. Por ejemplo, se lo acusó de frivolizar un debate que requería mayor profundidad y de mezclar figuras de distintas áreas, como héroes de guerra, religiosos y artistas.

"Aunque es evidente que la 'votación popular' a la que convoca este programa de televisión no puede constituirse en una suerte de 'tribunal de la historia', creo que en torno a este espacio se ha generado una situación interesante en términos de lo que podría denominarse la 'batalla por la
memoria'", indicó Grez.

"Los 10 personajes seleccionados nos demuestran el desfase existente entre la historia oficial, omnipresente en los manuales escolares y en la historiografía tradicional, por un lado, y la memoria popular, por el otro", añadió.

"Grandes íconos de esa enseñanza, símbolos de una visión de Estado y sociedad, no fueron considerados por nuestros conciudadanos llamados a constituirse en jurados", comentó el académico.

La conductora del programa, la periodista Consuelo Saavedra, indicó el miércoles que 60 por ciento de los estudiantes y académicos que votaron por los 10 finalistas tenían entre 13 y 24 años.

"Para indignación de los sectores más conservadores de la sociedad chilena, no quedaron en esta selección final figuras como Bernardo O'Higgins, Diego Portales, Manuel Montt, Arturo Alessandri, Carlos Ibáñez del Campo o Augusto Pinochet, 'padres fundadores' o 'refundadores' de la institucionalidad nacional en distintos momentos de nuestra historia, casi siempre al amparo
de la fuerza armada", indicó.

"En cambio, prácticamente todos los elegidos, a pesar de las grandes diferencias existentes entre ellos, tienen en común el ser personajes caracterizados por la firmeza de sus convicciones, su honestidad, el heroísmo o la sensibilidad artística y, en muchos casos, un final digno a la vez que trágico", concluyó Grez.(FIN/2008.

Max

viernes, septiembre 05, 2008

La pérdida de las utopías

Desde la caída de los socialismos reales a comienzos de la década del 90, y la pérdida de la valía intelectual que tenía el marxismo, que se venía produciendo desde fines del 70, se dio inicio una serie de discursos que postularon el fin de la historia, la muerte de las ideologías, la pérdida de la esperanza. Se dio paso, a la proliferación de un discurso profundamente optimista, de parte de los neoliberales, o un discurso completamente pesimista por parte de los marxistas de antaño, que se renovaron o derechamente se pasaron al bando contrario. Discurso en ambos bandos asentado, en la idea base de que las utopías estaban muertas, que ya nada se puede hacer en contra de esta sociedad de consumo, donde lo que predomina es la técnica, y el Dios máximo es el mercado. En donde lo único que nos queda por hacer es mirar el televisor y ver como la vida transcurre apaciblemente sin ningún contratiempos, como aletargados por el soma, esa pastilla, que aparece en “Un mundo Feliz” de Huxley, que te mantiene alegre y hace que te olvides de los problemas.
Pero frente a este discurso predominante, que como diría Foucault, actúa como un mecanismo de poder, que va creando realidades y que es ejecutado de una manera hegemónica, en el decir de Gramsci, por parte de la elite dominante, ¿que nos queda por hacer?, tal vez cerrar los ojos y taparnos los oídos, seguir aletargados por el soma de los logros materiales conseguidos o hipnotizados por ese Gran Hermano que es la Televisión de Masas.
Creo que ninguna de las respuestas dadas anteriormente son validas, frente a este discurso de pérdidas de las utopías, creo que nos queda rescatar al hombre en su completa humanidad, rescatar la esperanza que siempre está ahí, aunque se encuentre escondida, rescatar la conversación y los paseos al aire libre y sobre todo rescatar el amor, como dice Benedetti:
“ cómo voy a creer/dijo el fulano
que la utopía ya no existe
si vos/ mengana dulce
osada/eterna
si voz/sos mi utopía.

J. F. Rekabarren

Premio de Consuelo

Despídete de mi nombre por las mañanas, ahora q estoy aquí desnudo y con la mirada perdida en el techo de la habitación, con podredumbre en el alma, sabiendo que te estas vistiendo y perfumando para él, que te tomaras el pelo, para que nazca tu cuello a su beso.
Despídete sin énfasis, ya que las despedidas de ese tipo, son para los que se van para siempre y nosotros nos encontraremos en alguna parte, a pesar de que el tiempo transcurra.
Despídete con un beso suave que trate de opacar esta rabia y la derrota de tu partida esta mañana, y deja tu aroma rondado el silencio que lo inundara todo, como un premio de consuelo, como un maldito premio de consuelo.


J.F. Rekabarren

martes, septiembre 02, 2008

Por qué en ocasiones nuestro país resulta tan desagradable?

Chile, nuestro país, es un lugar que sin duda a sido “bendecido” por la naturaleza. Nadie puede poner en tela de juicio la majestuosidad de la Patagonia, o lo conmovedor que pueden resultar parajes como El valle de la Luna o la Isla de Pascua. Y Concepción tampoco se queda atrás, gran ciudad, agradable para vivir, todavía accesible y sin el stress de las grandes urbes.


Sin embargo, a pesar de todas esas bellezas, ventajas comparativas en relación a nuestros vecinos, estabilidad política, crecimiento económico, entre otras yerbas, hay muchos que pensamos que algo no anda del todo bien. Porque??

Cada uno tendrá su particular respuesta, para mi se relaciona con la implantación de un modelo económico que acrecienta la desigualdad social, donde el Estado solo cumple un rol subsidiario y en consecuencia, la economía modifica las relaciones sociales. En este sentido la sociedad ya no busca el bien común, sino más bien el éxito, el lucro, el consumismo, todos defectos humanos potenciados por un sistema económico que deja de lado lo social y fomenta el individualismo. El sistema neoliberal deja en manos de privados áreas en donde el Estado debería cumplir un rol fundamental y no subsidiario, casos emblemáticos son la salud y la educación. En este último aspecto el Estado ni siquiera cumple su rol fiscalizador, o sino miremos la ciudad y veamos la cantidad de “antros” que se hacen llamar Univer$idad.

Me da pena que, viviendo en un país tan hermoso, con gente noble y esforzada, mire a mi alrededor y me de cuenta que todo es exitismo, consumismo y negocio a costas de nosotros, los ciudadanos-consumidores.


Rodrigo